domingo, 26 de febrero de 2017

Mi crimen.
Sol de febrero como antídoto y criptonita.
Este ya se marcha. Giro mi mirada.
Domingo de negro. De funeral. De fin.
Ronca algún gato entre sábanas. Sábanas en camas desordenadas.
Cuarto del caos. Caos sin guerra. Guerra sin muerte.
Pero sigue siendo domingo. Giro mi mirada.
Y que siga siendo domingo solo significa aquello:

Domingo de negro. De funeral. De fin.

miércoles, 14 de octubre de 2015

Dejé de ser cuerpo para convertirme en cenizas.
Esperando a ser fénix.
Pero solo fui polvo.
Aire.
Y desaparecer con la primera bocanada.
Viento.


Sin fuego.
Sin alas.

jueves, 24 de septiembre de 2015

Que te jodan

De lo que duele. De todos aquellos que nos han dicho "la vida es dura". Y nosotros no hemos hecho otra cosa que creerlos. Creer que esto de aquí que no te deja dormir, es al final, la vida. Y nos arropamos en esa estúpida expresión. Sin ni siquiera permiso para caer, ni llorar. No estés mal. Sal. Emborráchate. Folla. Fóllatelos a todos. Te sentirás mejor. (Estúpidos.) Como si los besos y latidos de alguien al que mañana ni siquiera dirás buenos días, fueran a cambiar que la vida "fuera dura". Como si no tuviéramos bastante con nuestro propio sudor. Como si mi cama fuera lo suficientemente grande como para compartirla con un extraño. Así, acabas compartiendo el vaho de los cristales de los asientos traseros de un coche que ni sabes su color. Así acabas por dejar que te jodan, mientras por 37 minutos la vida a dejado de ser dura. Para ponérsela dura.